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1/10/08

Palabra de Morabito. El desastre de Annual


(Por eso, porque esta no es una AkaKronica, es Palabra de Morabito).


Tenía que estar allí... Una y otra vez pasamos por la carretera de la costa entre los acantilados de tierra roja y gris... y el mar.
Pero se resistía y a la vez llamaba.....SIDI DRIS.
El viejo mapa de las posiciones dispuestas por el General Fernández Silvestre , (o por el propio demonio) para el desastre, la situaba en una cota alta, dominando el mar y las estribaciones del Rif, 


Al borde de la carretera, en un puesto militar marroquí, unos soldados que parecian pescadores limpiaban y engrasaban viejos fusiles. Cuando nos vieron llegar y detuvimos las motos frente a ellos, nos miraron sonriendo. Era Ramadán. No conocían la existencia del reducto, pero para ellos Sidi Dris eran unas casas al lado de una gran antena telefónica.
Una vez más volvíamos a pasar por la carretera , cerca del río Amekcrane. Ahora estábamos más cerca, entre el rumor del mar podíamos oir el murmullo, los gritos silenciosos de los muertos de Sidi Dris.

En aquellos días de 1921, la guarnición de Sidi Driss la componen una compañía de infantería del regimiento Ceriñola, una seccción de Melilla, una compañía de ametralladoras, destacamentos de artillería, intendencia, compañía de mar, telegrafistas y policías. Un total de 300 hombres. A su alrededor miles de chilabas pardas con fusil dispuestas para el asalto.
Sólo 12 hombres salieron de allí con vida, el resto quedaron enterrados en la tierra roja.

Llegamos cerca de la antena, subimos hasta el borde del acantilado al lado de una casa en ruinas y aparcamos allí las motos. El silencio nos envolvía.
Bajo el cortado se ve una huerta ordenada que acaba en la orilla del mar, una cabaña de pescadores y el horizonte azul.
Alguien subía: nos había oído llegar. El motor de la Shadow siempre ronronea su llegada. El hombre subía con la desgana y a la vez con la decisión del caminar rifeño. Era muy moreno con un fino bigote, vestía una candora sucia, por su aspecto podía estar caminando en cualquier siglo, en cualquier época anterior.
- ¡Amigos!, ¡bienvenidos! - La frase de toda la región esta vez sonaba sincera. Vivía allí, "Un sitio espesial". Si, era un pequeño paraíso, un lugar de ésos donde el tiempo se detiene ante una carretera que se pierde bordeando el mar.
- Todo bien? Necesitáis agua? Comer?- No, gracias,
Le preguntamos por la posición con la angustia de pensar que era nuestra última oportunidad.
- Si! Allí! Una "cosa de española muy antígua" - Dijo señalando una montaña que situó al otro lado de la carretera.
Cambiamos las botas por calzado más adecuado para iniciar la subida. No sabía si el corazón me latía tan fuerte por el ascenso, mi mala forma física o por la emoción de encontrar ese lugar.


El alto comisario encargó a dos buques de la armada: el Laya y el "Princesa de Asturias" que protegieran Sidi Driss y , en caso de no sostenerlo, favorecer la retirada, recogiendo a bordo a la guarnición. Después de 4 días de combates se ordenó la evacuación. Parte de la salida se ordenó por el cortado intentando ganar la playa, pero fueron aniquilados. Fuego de fusil ,cuerpo a cuerpo, luego a cuchillo.

Las aguas de la lluvia marcaban una trinchera natural que recogía restos de piedras de la posicion. Ya casi estábamos. Las montañas nos observaban. A lo lejos se ven casas blancas, algunas agrupadas con minarete que las convertían en población con mezquita.
En los valles del Rif se escuchan las oraciones. "Alá akbar" el eco de la suma de todas a destiempo estremece.

¡Allí estaba! Caminábamos encima de los suelos dormidos, con piedras en punta entre muros que no existían. Piedra sobre piedra. Piedras marcadas por cientos de impactos de bala.

Nuestros ojos miraban el suelo en busca de algún vestigio alrededor, para sentir lo que aquellos muchachos de 18 años llamados a filas y a morir allí, habían visto. Este enlace resume muy bien los hechos: http://www.ingenierosdelrey.com/guerras/1921_annual/personajes/velazquez_gil.htm
El comandante Velázquez, jefe de la posición, vió que la evacuación era imposible, así que decidió que era debido morir por la patria, muriendo en efecto allí con todos los que habían quedado.

No corrieron mejor suerte el resto de las posiciones. Annual era un caos y en la huída desordenada entre los valles y las montañas fueron cazados y degollados cerca de diez mil españoles, el general Fernández Silvestre entre ellos (o llevado directamente al infierno, nunca se encontró su cuerpo).

Aka encontró un casquillo de Mauser, yo un hueso. Una costilla, creo. Reposará en la península. Recomiendo la lectura del libro de Manuel Leguineche "Annual 1921", que fué una de las causas de este viaje.
Bajamos hacia donde dejamos las motos. Como siempre había gente en la carretera, el dueño se había puesto camisa blanca y pantalones, nos esperaba allí, en su "lugar espesial". Hablamos de pesca, de la vida tranquila, de sus hijos emigrados a Europa...
Allí arriba queda SIDI DRIS. (Dedicado a Manu Leguineche. "RIF 1921")

7 comentarios:

Ruko dijo...

Muy buena cronica se me ha hecho corta el tema de sidi y esa costilla reposa en la peninsula....? me quedao flipado.
Un Saludo.

julian dijo...

Pues si Ruko, nos trajimos un hueso para la península.
Al parecer años mas tarde la posición fue empleada como objetivo de adiestramiento de la artilleía naval y los restos de los defensores enterrados en una fosa común, se esparcieron como consecuencia de los disparos.

Unknown dijo...

Preparando un vieje al Rif, me detuve especialmete en el desastre de Annual, con el fin de recorrer un poco esos históricos andurriales.
Tengo claro la localización de Sidi Driss, el reducto donde al parecer se podría haber establecido una defensa coherente, al tener agua, abastecimientos y posibilidades de ayuda marítima, pero aún no había encontrado un relato de la caida del enclave. Por lo que veo hay mucha memoria que recuperar del paso de España por el Rif.
Lo que si tengo claro, es que nada de nuestra historia de los últimos 80 años, habría sido de la misma manera sin nuestra intervención en El Rif, sin Annual ni Alhucemas.

Anónimo dijo...

Hola soy César, GS 800
Te recomiendo que leas, que seguro que lo habrás hecho, "Imán" de Ramón J. Sender.
Es el relato más alucinante que he leído sobre la guerra de Marruecos y en concreto sobre el desastre de Annual.
Si no lo tienes te lo dejo.

julian dijo...

Ave Cesar!. Pasámelo que me lo leeré otra vez. Muy bueno, sí señor.

Anónimo dijo...

Otros libros muy buen sobre el desastre de Marruecos son el segundo volumen de LA FORJA DE UN REBELDE, de Arturo Barea y un libro de relatos sobre la guerra de marruecos, EL BLOCAO. Mas reciente, hay una buena novela de LORENZO SILVA basada en el sitio de Sidi Driss y Afrau "El nombre de los nuestros"...

Uno de Melilla dijo...

Sidi Driss 21 Julio 2012
Es impresionante el silencio en esa posición.... esas impresionantes vistas del mar...

http://fotografiasdemelilla.blogspot.com.es/search?q=sidi+dris&m=0